En esta tercera edición se tratararón los aspectos más candentes en el campo de la Televisión Digital, como la TDT de pago.
Otro de los temas que se trataron es la Alta Definición, estando presente los principales actores del HD en Europa. Estos temas se complementaron con el análisis de la situación de las Televisiones de demarcación local, con presencia de la Oficina de Transición, ejemplo de televisión pública de servicio, y experiencias en formación a través de la televisión digital, o teleformación. La Alta Definición es ya una realidad tecnológica, pero no se desplegará hasta después del apagado analógico. Se plantea la necesidad de un Plan Nacional de Alta Definición
Existió además una mesa que analizó la evolución de la interactividad sobre MHP, lo que ha venido a llamarse Interactividad 2.0, que estudiará la situación actual de los servicios interactivos y su proyección a futuro, como nueva forma de acceso universal a la Sociedad de la Información. La interactividad aporta mucho valor a empresas, radiodifusores y sociedad en general. Es imprescindible incorporarla al desarrollo de la TDT en España. Sin embargo, sigue siendo la gran desconocida por parte de los ciudadanos y no es impulsada por los radiodifusores. La interactividad será una forma segura de hacer transaciones. Es necesario la existencia de un canal de retorno. Las Administraciones Públicas deben impulsar de forma clara el desarrollo de esta interactividad 2.0 en España, favoreciendo el despliegue de un mercado horizontal de receptores que la lleven incorporada. El ministerio debería liderar un movimiento que desarrollara la interactividad. No se puede marear al usuario con continuas transiciones.
Sería necesario invertir en I+D para solucionar los problemas de estandares o formatos. Los operadores de televisión se limitan a emitir por lo que la interactividad llegará de la mano de los fabricantes de tecnología o las empresas de telefonía móvil.